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Mostrando entradas de mayo, 2017

Hoy me libero

De las noches que te he esperado De todos los besos Que me he guardado Y de los versos que no he recitado De los sueños que he fingido De los cansancios que no he sentido del amor que me has prohibido de las mentiras que han pasado libres y bailando entre mis ojos incrédulos y los tuyos falsamente emocionados de aquellas verdades silenciadas, amordazadas ocultas ante mis ojos que fingían ver otra esquina finalmente han ganado finalmente han hablado y ahora me liberan, a gritos de impaciencia impaciencia a que respondas a que admitas todas tus mentiras y dejes de llamarme loca impaciencia por buscar a ese ser sincero que conocí aquella tarde en aquel basurero y cansados de callar los gritos silenciosos se elevan en el aire, están cansados de ignorar de todas estas cosas me libero hoy desato nudos y golpeo a tus mentiras contra el muro hoy rompo máscaras y alumbro, aquellas verdades mal oc

La princesa y el Rebelde

Ella lucía como una princesa Siempre impecable Hasta cuando “descuidaba” su imagen Se veía tan arreglada. Él era tan contrario Parecía siempre igual Desarreglado hasta cuando se arreglaba Lucía siempre como un niño rebelde. Ella bailaba con The Cure Él oía una banda under Que había conocido una madrugada En alguna plaza. Ella recitaba a Shakespeare Y soñaba con Leonor Perdida entre amarillentas páginas De olvidados libros. Él desperdiciaba insultos Con olor a alcohol. En aquella plaza Se dedicaba a odiar al sistema. y, en algún punto perdido, entre estos versos, escondido, Schubert tocaba con Sex Pistols Y Poe recitaba contra la política.

Muñeca Vacia

Lo intenté, Quise quererlo Más de lo que quiero ahora un café                        Y juro que lo intenté. Pero nada parecía suficiente Él era un ser tan diferente Y quise quererlo Casi tanto Como él decía quererme a mi Pero yo era solo una muñeca vacía, Incapaz de sentir. Me busqué En el fondo de sus ojos, De esos ojos color café. Lo dibujé En el hueco de mi pecho, En el vacío de mi ser Pero no había nada allí Solo unas desordenadas hojas Y el frio De aquel invierno que nunca se ha ido. Escribí tu nombre en cada rincón Pero desaparecía sin razón. Intenté quererte Como a uno de mis personajes Pero tú eras tan diferente. Intenté recrear Cuanto decías sentir por mi Pero yo era solo una muñeca vacía, Incapaz de sentir

Barcos

Remé a salvarte cada vez que te ahogaste Y te subía a mi bote No importaba cuantas veces te quedaras con él. Y me abandonaras Yo volvía a comenzar Y remaba a salvarte otra vez. Pero un día construí el mejor barco Y lo adornaban Aquellos viejos remos Que por ti desgaste Y navegué en otra dirección Y tú te quedaste allí Hundiéndote junto a todos los botes Que por ti construí Y me veías alejarme Y yo te veía ahogándote Y quisiste nadar hacia mi Pero esta vez yo estaba lejos Y ya no volvería por ti

Luna

Perdida entre vodka y cigarros Aquella noche la encontré Parecía cargar la tristeza de todos los infiernos En sus grandes y negros ojos Parecía Que nada la sorprendería Parecía conocer Todas las jugadas de la vida La lluvia caía Y ni los mechones de cabello Pegados en su rostro, goteando Aminoraban su belleza No era la primera vez que la veía Cantaba bajito En un idioma que yo no conocía Quizás sobre la vida, al amor o filosofía Y su tenue sonrisa brillaba Y yo jamás comprendería ¿Por qué aun así sangraba?

Vivo con tus Fantasmas

La luna salía Y yo en mi ventana Esperaba poder mirarte Pero era más fácil volar a Marte Tú ya no pasabas por aquí Ya no te vería parada en mi jardín Con la excusa de que estaban raptando perros Y venías a ver que Firulais no tuviera miedo   Y por más que uno siempre se enfriara Yo aún preparaba Dos tazas de café Cada mañana Y aunque solo Firulais me oyera Aun tocaba Beethoven en cada tormenta Y escuchaba a Schubert Cada noche estrellada Quizás ya no estabas Pero tus fantasmas se habían quedado A vivir en el ático Por si algún día volvías los dejé estar allí junto a tus locos hábitos

Lluvia

La lluvia Y su forma de hacerme recordar Aquellas cosas del pasado Que realmente Me gustaría haber olvidado. Su fuerte golpeteo suena en mi cabeza Recostada sobre mi almohada Su suave brisa entra por mi ventana Y me hace elegir entre malos recuerdos O la nostalgia. De a momentos ella se calma Y a mi mente acompaña En dulces sueños garabateados, Entre las manchas del techo Garabateados. De a ratos, explota en rabia Y un relámpago entra por mi ventana Desarmando memorias que correteaban Alrededor de la cama Y dejándome admirada Entonces el cielo ruge, estalla en enojo, Y siempre pensé Que era la Tierra quejándose Y es que algunos gritan y lloran Para mostrar su dolor. Otros se inundan en letras y alcohol. Pero con gritos o alcohol El dolor es dolor Y la lluvia cae cuando yo recuerdo Y yo recuerdo cuando siento su frio viento.

Yo Soy

Yo soy ella,  Soy la niña, la chica y la señora; Yo soy La madre La tía y La amiga, Y a veces Ni siquiera soy mujer. Yo soy él Y ellos Soy el peluche que observa en el estante Y soy la pared que Todo escucha. Yo soy… Yo soy el personaje Que el lector quiera crear. Yo soy una hoja en blanco que adornar. Yo soy a quien odias Y soy a quien amas. Yo soy quien evitas Y soy tu confesionario. Yo soy poesía Soy cuento y soy historia. Yo soy quien conoces, Quien conociste y quien jamás verás. Yo soy lo que quieras que sea: Hombre, mujer u objeto; Niño, adulto o viejo; Odio, amor O la nada misma. Yo soy… Soy una hoja en blanco Que adornas a tu gusto. Yo soy reina o plebeyo, Soy oscuridad o un día soleado, Soy asiática o europea, Americana o africana. Yo soy tú Y tú eres yo Yo Soy lo que quieras que sea

Reina

Y entonces apareció: Con su inocente sonrisa de niña Y su cabello dorado, Haciéndome recordar Una dulce criatura Un día, reina de un mundo rosa de cristal. Su voz, Dulce y melodiosa voz, Me recordó El día en que todo acabó Y en un mundo de sombras esa reina quedó Y de las hadas se alejó, Para gobernar en un mundo de oscuridad Lleno de personas y soledad. Pero la dulce niña se fue Y yo me quedé ahí parada Viendo ese mundo rosa Escaparse de mis manos Dejándome en oscuridad y recuerdos. Y la soledad me vuelve a arrullar Mientras la niña se aleja Saltiteando y cantando.

Frio Infierno

por qué insisto en escribirle a Ella, teniéndote a ti, mil veces más agradecido que Ella cruel, tan cerca? por algo será que las musas siempre han sido mujeres no lo crees? pero así como inspiradoras saben ser crueles y quién mejor para decirlo? me sé musa de más de uno pero amante de ninguno, desalmada me dicen unos, ángel de fria piedras, otros, Doncella esculpida en hielo, y aún con todo esto, poeta que jamás aprendió a amar mas aprendió de la crueldad de su propia Doncella. Con crudas palabras me enseñó a escribir, a recitar y a suspirar, por ver en mi crueldad reflejada la suya, en mis letras su vanidad y en mis suspiros mi lealtad al único ángel y frio infierno que siempre escribiré